hay cosas de las que es mejor no hablar.

Es re loco. Porque hay temas que tengo constantemente en la cabeza, tan presentes, tan nítidos, tan fuertes. Que me golpean, son vocecitas incansables que me hablan desde adentro. De cosas que tendría que preguntar, decir, no callarme. No quedarme con la duda. No quedarme con que está todo bien. Porque evidentemente no está todo bien. Capaz uno se entera de cosas que no debería enterarse, por unas u otras razones, y se las tiene que callar. Pero.. ¿está bien callarse? Porque creo que si nos dijéramos las cosas y expusiéramos ante los otros lo que sentimos todo sería mucho más fácil. El problema es que entre decirlo y hacerlo hay una diferencia MUY grande. Obvio, acá lo escribo, no lo lee nadie. Pero si tuviera que decir todo lo que pienso, todo lo que necesito saber, todo lo que me inquieta, todo lo que me hace falta expresar.. ¿podría? Yo creo que me costaría. Mucho más siendo, como ya sé, una persona TAN insegura. 

Pero nada, creo que todo a su tiempo y en su forma. Cuando se dé, preguntaré los por qué y los cómo que no me dejan tranquila.