Mis relaciones afectivas siempre fueron así: difíciles de concretar (y hasta imposibles) y dotadas de una obsesión incandescente. Una obsesión que me consume, que me mata, que me hiere y que aún así defiendo.
17 abr 2011
PD: te amo.-
Hoy tengo ganas de gritarte que ¡Te amo!
tengo dos problemitas: no me da lagarganta por las fuckings amigdalas,ni el valor para decírtelo.-
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